Ciudad de México.-Los gobiernos estatales reforzarán la estrategia de defensa de los migrantes mexicanos en Estados Unidos que instrumentará el Ejecutivo federal, para ofrecer una estrecha asesoría legal a quienes estén en riesgo inminente de deportación.
Al reunirse con el presidente Enrique Peña Nieto, la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) acordó promover recursos legales en un esfuerzo ‘‘inédito’’ que ‘‘congestionará el sistema judicial estadunidense’’ para evitar abusos, pues se conoce de 250 mil requerimientos de autoridades migratorias del país vecino.
También, cada gobernador cabildeará con las grandes empresas asentadas en sus estados para que a su vez éstas realicen lobbying en Estados Unidos exponiendo las desventajas de la nueva política comercial.
El gobierno federal les informó –dijeron gobernadores– que, como parte de las negociaciones con Estados Unidos, se acordó un plazo de tres meses para que cada gobierno realice las consultas internas necesarias para iniciar la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
‘‘México habrá de negociar a partir de sus fortalezas, de lo que aporta, en lo que coopera y es importante para el país’’, planteó Peña Nieto en el encuentro. ‘‘Somos dos países soberanos que tenemos intereses compartidos de orden económico’’.
Al dar a conocer pormenores, la Presidencia mencionó dos acuerdos centrales: mantener estrecha coordinación en los esfuerzos que realicen el gobierno federal y los estados para multiplicar las relaciones con interlocutores y actores políticos en Estados Unidos, y coordinar las acciones de protección a nuestros connacionales.
En la reunión, Peña Nieto reconoció los esfuerzos que cada gobierno estatal ha realizado para enfrentar la coyuntura, llamándolos a preservar la coordinación. ‘‘Hoy más que nunca nos es muy relevante e importante abrir espacios de acercamiento y de diálogo con los actores políticos de Estados Unidos, más allá de los que históricamente el gobierno de México haya ya construido’’.
Ante los 250 mil requerimientos de las autoridades migratorias estadunidenses, la Conago pactó fortalecer estrategias jurídicas porque ‘‘no vamos a permitir ningún acto unilateral que vaya en detrimento de los derechos humanos de los migrantes y del principio de convivencia internacional’’.
Durante tres horas y media, 31 gobernadores (sólo faltó el de Aguascalientes) se reunieron con el Presidente –quien estuvo acompañado por los secretarios de Relaciones Exteriores, Gobernación, Hacienda, Economía y Educación– para conocer los pormenores de las negociaciones en Washington. Asimismo, propusieron estrategias para respaldar la posición del Estado mexicano frente a las acciones ‘‘inamistosas’’ del presidente, Donald Trump.
El presidente de la Conago, Graco Ramírez, señaló que se buscarán encuentros con la organización de gobernadores estadunidenses y alcaldes para exponer el impacto negativo que en ambos países tienen los nuevos términos de la relación que pretende Trump.
En ese contexto se prevé una reunión entre los mandatarios de los estados fronterizos (Texas, Nuevo México, Arizona y California, por Estados Unidos, y Tamaulipas, Nuevo León, Chihuahua, Coahuila, Sonora y Baja California, por México), donde se estima que se concentren las mayores repercusiones de este nuevo escenario.
La propuesta de la Conago es que con acciones de los gobiernos estatales se complemente los esfuerzos del gobierno federal cuya estrategia, instrumentada por la Secretaría de Gobernación, pretende acotar el efecto de las deportaciones.
En la reunión, Peña Nieto instruyó al canciller Luis Videgaray para coordinar los esfuerzos institucionales que realicen el gobierno de la República y los estados para abrir esos espacios de diálogo y presencia propositiva en Estados Unidos.
El gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, al referirse a la renegociación del TLCAN, refirió que se les explicó que México participaría sobre la base de que no se lesionará la soberanía nacional, no se instrumentarán acciones unilaterales que pongan en riesgo las remesas que los mexicanos envían al país y no se impondrán mayores aranceles a las exportaciones.
A su vez, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, señaló que tras una larga exposición sobre los términos de las primeras conversaciones quedó claro que la postura de México es reivindicar la importancia de una relación comercial acentuada por años.
La Jornada