Ciudad de México. Tres funcionarios promotores del impuesto a las bebidas azucaradas en México fueron víctimas del ciberdelito a través de un programa espía (spyware) fabricado por NSO Group, un grupo de Israel dedicado a la distribución de armas cibernéticas, presuntamente dedicado a suministrar herramientas sólo a entidades gubernamentales para detectar criminales y terroristas, según información difundida en el diario estadunidense The New York Times (NYT) y el sitio interdisciplinario de Canadá, Citizen Lab.
El doctor Simón Barquera director del área en políticas y programas de nutrición, del Instituto Nacional de Salud Pública; Luis Manuel Encarnación dirigente de la Fundación Mídete; y Alejandro Calvillo activista e integrante de la fundación El Poder del Consumidor, fueron víctimas de un ciberdelito, que a través de mensajes de texto entró a sus teléfonos celulares. Los mensajes llevaban un enlace que los dirigía al sitio web de una funeraria ubicada en la Ciudad de México, y a través de este se instaló el spyware.
En el artículo publicado en el NYT, los funcionarios explicaban que no estaban seguros de qué organismo gubernamental podría estar detrás del hackeo. Dijeron, además, que son precavidos respecto a lo que dicen mientras usan sus teléfonos.
Por su parte, Lorena Cerdán directora de ConMéxico (organismo empresarial que representa a la industria de bienes de consumo en México) dijo que es el primer caso de este tipo de hackeo en el país.
La intromisión del spyware coincidió con la campaña mediática que planeaban Barquera, Calvillo y Encarnación para promover que se doblaran los impuestos a los refrescos, esto después de que los tres se opusieran abiertamente a la resolución de legisladores respecto a bajar los impuestos a dichas bebidas, en noviembre de 2015.
Una semana después de que se anunciara la campaña en una conferencia de prensa el verano pasado, los teléfonos de los funcionarios fueron intervenidos.
Según el Times los gigantes de la industria de refrescos tienen a lobistas dentro de los grupos como Con México, que representa a las empresas Coca-Cola y PepsiCo.
Ante este caso, Luis Fernando García director de la Red de Defensa de los Derechos Digitales (R3D), explicó que el spyware de NSO Group es más invasivo que otras formas tradicionales de interceptar, y que no queda claro qué organismo podría estar monitoreando las comunicaciones de los activistas e investigadores de la salud, Barquera, Calvillo y Encarnación.
La Jornada