La brecha en la balanza con México creció un 22% el pasado mes de enero respecto a diciembre
Nueva York.-La economía de Estados Unidos arrancó el año anotándose un incremento mensual del 9,6% en el déficit comercial, que ascendió en enero hasta los 48.500 millones de dólares. Es la brecha más alta entre las importaciones y las exportaciones en cinco años. La tendencia al alza supone un nuevo reto para el presidente Donald Trump, que puede alimentar su retórica proteccionista.
El objetivo del magnate republicano de reducir el déficit está creando una atención especial en Wall Street hacia el indicador que publica cada mes el Departamento de Comercio. El valor total de las importaciones fue de 240.600 millones, un 2,3% de incremento. Se explica por una mayor entrada de productos de consumo desde China, como teléfonos móviles y productos textiles.
El dato refleja que las exportaciones rondaron los 192.100 millones. También crecieron, aunque a un ritmo de solo el 0,6%. El impulso llegó del lado de los envíos de coches y camiones, petróleo y de soja. Por países, el déficit con China creció un 12,5% en enero, hasta los 31.300 millones. El incremento mensual con México fue superior del 20%, hasta los 5.500 millones.
El alza del déficit comercial está en línea con el consenso de mercado, que anticipaba una brecha de 48.800 millones. El dato de diciembre queda en los 43.300 millones. Es la brecha más amplia desde marzo de 2012, cuando el déficit fue de 50.200 millones. El secretario de Comercio, Wilbur Ross, advierte que será agresivo a la hora de garantizar que se respetan las reglas de juego.
El incremento del déficit tendrá, sin duda, un efecto lastre en el rendimiento general de la economía de EE UU. El cuarto trimestre se cerró con una tasa anualizada de expansión del 1,9%, que en el mejor de los escenarios podría mantenerse durante los tres primeros meses de 2017. La apreciación reciente del dólar hace las exportaciones menos competitivas aunque también abarata las compras de productos extranjeros.
La reducción del déficit comercial fue uno de los caballos de batalla de Donald Trump en pasada campaña a las presidencia. Peter Navarro, nombrado por el presidente para el consejo nacional de Comercio, un órgano de nueva creación dependiente de la Casa Blanca, insiste que el objetivo para conseguirlo es lograr que los acuerdos comerciales firmados con sus socios sean más “equilibrado”.
El País