La omisión de las autoridades capitalinas y federales ha permitido que tres gaseras clandestinas operen sin problema en la delegación Xochimilco, denunciaron vecinos.
La primera gasera, ubicada en prolongación Acueducto 419, en el pueblo de Santiago Tepelcatlalpan, carece de uso de suelo, programa interno de protección civil, licencia de construcción y estudio de impacto ambiental, y aun cuando fue clausurada por el Instituto de Verificación Administrativa, sigue surtiendo a unidades de la ruta 26 de transporte colectivo, dirigida por Arturo Morales.
Las otras dos están en la carretera Xochimilco-Oaxtepec y en la segunda cerrada del bosque de San Luis Tlaxialtemalco, donde operan con total impunidad, pues carecen de autorización y medidas de seguridad para despachar, aseguraron.
Por otra parte, la Asamblea Legislativa apremió a la Consejería Jurídica a formar una mesa de trabajo para diseñar una estrategia que impida la instalación indiscriminada de gasolineras en la capital.
El diputado perredista Raúl Flores recordó que en enero pasado comenzó la instalación de las primeras gasolineras de empresas trasnacionales, y existe la amenaza de que British Petroleum abra mil 500 en el país en los próximos cinco años, al eliminar para ello reglamentaciones o normas federales.
La Jornada
