Los atacantes locales no encuentran cabida en su torneo y los clubes priorizan a los jugadores extranjeros
Ciudad de México.-Pasan las temporadas y México se queda sin nuevos atacantes. Las nuevas camadas que sustituirán a los Chicharito y Peralta se enfrentan un laberinto. Solo dos equipos apuestan por la renovación de sus nueves, Atlas y Chivas, dos de los semilleros. De los 68 delanteros registrados, solo 21 son mexicanos y menos de la mitad son titulares.
“Es una posición tradicionalmente ocupada por extranjeros incluso cuando se permitían cuatro extranjeros. En los setentas u ochentas la cantidad de foráneos no era tanta y daba pie para que los mexicanos florecieran”, menciona Roberto Gómez Junco, comentarista de ESPN.
El fútbol mexicano no se ha caracterizado por exportar un sinnúmero de delanteros como sí lo han sido Argentina y Brasil, aunque se ha hecho fama por generar guardametas. Pese a ello han surgido algunas perlas como Hugo Sánchez.
Jared Borgetti es el máximo goleador de la selección de México. Él considera que en la liga quedan muy pocos delanteros naturales, de esos que tienen un romance con el gol. “No somos un milagro. En un país tan grande y con muchos futbolistas somos pocos los que realmente pudimos tener la capacidad. Al delantero mexicano hay que darle preparación, tiempo y confianza”.
“El mexicano tarda en fraguar y ya no hablemos de si es un futbolista de mitad hacia adelante. El delantero tarda en encontrar su espacio y en consolidarse”, opina Luis García Postigo, exjugador del Atlético de Madrid.
En mayo del año pasado los dirigentes del campeonato local decidieron establecer la regla 10-8 en la que los equipos pueden alinear a una decena de extranjeros y convocar a ocho mexicanos. Uno de los motivos fue promover el desarrollo de los equipos juveniles, sin que eso signifique que deban ser mexicanos. “Se puso para que el negocio subsista, es más caro formar a un jugador”, considera García Postigo. La liga tiene un registro de 474 jugadores y de ellos 207 son foráneos.
El formato de la liga mexicana está dividido en dos torneos por cada temporada. Cada seis meses los clubes buscan coronarse. “Los equipos van por jugadores ya probados, que vengan a cumplir. Los dirigentes piensan que los jóvenes no aseguran títulos”, asegura Borgetti. “El fútbol mexicano se ha acostumbrado por ser malinchista, siempre apantalla más lo que viene afuera en el caso de técnicos y delanteros”, considera Gómez Junco.
“En todos los equipos que estuve siempre traían centro delanteros foráneos, como Sebastián Abreu en Cruz Azul. Lo hacían porque según eran mejor, pero yo terminaba jugando. Tenía que aprovechar las oportunidades que eran escasas”, menciona Juan Carlos Cacho, exgoleador del Pachuca.
Borgetti y Luis García concuerdan en que los clubes mexicanos requiere de un entrenador especializado en delanteros. “Está claro que es una posición que se necesita esculpir”, considera García Postigo. “No explotamos las capacidades que tienen cada uno de los futbolistas porque cada uno es distinto”, opina Borgetti.
El nueve mexicano no tiene un perfil definido. “Todos somos distintos, no existe un estereotipo”, considera Luis García. Los atacantes varían en estatura, corpulencia y capacidad de jugar con el balón. Hugo Sánchez se considera el mejor por reunir las características de gran cabeceador, elástico y eficaz con 307 goles en Europa.
El ariete mexicano más constante en la liga es Oribe Peralta del América. En los últimos cinco años ha anotado 89 goles en el torneo local. Chivas es el único conjunto que juega con futbolistas mexicanos y ahí se han consolidado Alan Pulido (26 años) y Ángel Zaldívar (23), como sus suplentes están Guillermo Martínez (21) y Michelle Benítez (21). En Atlas han dado un espaldarazo a Martín Barragán (25) y a Jahir Barraza (26).
En el Club Puebla está Jerónimo Amione (26) y Eduardo Pérez (23). En Veracruz, el conjunto con más extranjeros, apuestan con Eduardo Herrera (28) y Javier Orozco (29). Ángel Sepúlveda (26), un centro delantero que ha mutado como un volante, se ha ganado un lugar en Querétaro.
Los suplentes son Henry Martín (24) en Xolos, Santiago Palacios-Macedo (25) de Pumas, Enrique Esqueda (28) en Chiapas, Alejandro Díaz (21) de Necaxa, Ronaldo Cisneros (20) en Santos Laguna, Aldo de Nigris (33) y Marcos Bueno (22) en Monterrey. Conjuntos como León, Monarcas, Pachuca y Tigres no tienen a centro delanteros mexicanos en sus plantillas estelares.
Los nueves mexicanos “necesitan dirigentes más visionarios, menos avorazados en el corto plazo. Deben invertirle a la producción de futbolistas que incluso es mejor como negocio”, concluye Gómez Junco. La escasez de delanteros mexicanos ha repercutido en los campeones goleadores. El último punta en conseguirlo fue Chicharito en 2010, el mismo año en que fue fichado por el Manchester United.
El País