Julián Manuel Loisa, El Toro, y Francisco Pancho Carreón, líderes de células de los cárteles del Golfo y Los Zetas, respectivamente, en el municipio de Reynosa, Tamaulipas, fueron abatidos luego de sostener durante horas enfrentamientos con efectivos de la Secretaría de Marina (Semar) en diversas partes de esta zona fronteriza.
Los choques provocaron que habitantes de Reynosa vivieran horas de terror al amanecer, luego de que los cómplices de los jefes de la plaza bloquearon calles y avenidas principales en entradas y salidas hacia otras ciudades de la franja fronteriza, así como a San Fernando.
También incendiaron 12 vehículos en los principales cruceros de la ciudad y en nueve comercios ubicados en puntos estratégicos, para distraer a las autoridades.
Ante esto, el gobierno de Coahuila, a cargo del priísta Rubén Moreira Valdez, pidió a sus ciudadanos no viajar a Reynosa, debido a la violencia en aquella ciudad.
Esta urbe fronteriza se encuentra desquiciada desde hace tres días por los enfrentamientos entre integrantes de Los Zetas y del cártel del Golfo, por lo que los ciudadanos se resguardan temprano en sus domicilios, pero anoche decenas de trabajadores quedaron atrapados en sus centros de labor debido a que el servicio de transporte se suspendió y la población alertó sobre los hechos de violencia.
Para los bloqueos, los sujetos armados utilizaron camiones de carga, autobuses urbanos y unidades de transporte de las maquiladoras. Simultáneamente hubo incendios en estacionamientos de una tienda de autoservicio.
Se reportaron 32 cierres en las colonias Fuentes, El Olmo y Doctores, así como en el bulevar Mil Cumbres, la Avenida Central, los parques del Norte y Colonial, el libramiento Monterrey, el ejido Palo Blanco, lo mismo que en las salidas a San Fernando, Monterrey y río Bravo.
Helicópteros de la institución naval sobrevolaron por varias horas la ciudad fronteriza, mientras pistoleros y marinos se enfrentaban a balazos en tierra.
La madrugada de ayer, luego de que integrantes de la Semar localizaron a Loisa e intentaron detenerlo en calles de la colonia Lucio Blanco, el vehículo en el que viajaba El Toro se impactó contra un árbol. Éste y sus acompañantes descendieron del automotor y abrieron fuego contra los efectivos.
Tras el intercambio de disparos, el líder del cártel del Golfo murió, mientras integrantes de su célula delictiva iniciaron una serie de bloqueos, quema de vehículos y comercios en distintos puntos de la ciudad.
En tanto, en la carretera Llera de Canales-Ciudad Victoria, los efectivos de la Marina fueron agredidos con armas de fuego, lo que generó un enfrentamiento en el que cayó Francisco Carreón.
A pesar de los hechos de violencia ningún integrante de la Semar ni ciudadanos resultaron heridos o muertos.
La Jornada