Más de 40 por ciento de la gasolina que se expende en las estaciones de servicio mexicanas proviene del comercio ilícito, según un muestreo de la empresa especialista en programas de marcación de combustibles Authentix.
En un documento en el que explica los beneficios de implementar programas de marcación de combustibles, la firma indicó que en 2016 más de 360 millones de litros de combustible se marcaron en la terminal del municipio de Zapopan, Jalisco, para detectar qué cantidad provenía del comercio ilegal.
Explica que para ello realizó un total de 837 pruebas en 360 gasolineras y encontró que de ellas, en 151 el combustible provenía del robo, la infiltración mediante la dilución, la adulteración, o sencillamente era producto ‘‘sospechoso’’, con lo que el índice de comercio ilícito fue superior a 40 por ciento.
De acuerdo con datos de la empresa, dicho porcentaje se encuentra en línea con lo que ocurre a escala internacional, pues según su experiencia, con los recientes 20 programas de marcación de combustible realizados en Serbia, Ghana, Sudáfrica, Kenia y países de Medio Oriente, el comercio ilícito que se llevaba a cabo representaba entre 20 y 40 por ciento del comercio de combustible.
Vigilancia interrumpida
La empresa detalló que Pemex detuvo el programa en septiembre de 2016, antes de comenzar la acción de aplicación, la cual debe incluir la redacción de instrumentos legislativos que autoricen la obtención y prueba de muestras y permitan a algún organismo de control enjuiciar e imponer sanciones para los contrabandistas, que incluyen multas, confiscación, cierre de establecimientos y cárcel.
El programa funciona con marcadores aprobados por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, que permiten la detección y cuantificación del paquete aditivo de las empresas comercializadoras de petróleo por medio de un análisis de laboratorio.
Los resultados del citado análisis y los datos –como la información de ventas y la del proveedor de transporte– permiten que los reportes brinden información al cliente sobre la integridad de su cadena de suministro.
La firma estadunidense destacó finalmente que México sufre pérdidas significativas ocasionadas por el robo de combustible de los oleoductos y la infiltración de gasolina robada en la cadena de distribución de Petróleos Mexicanos.
La Jornada