El nivel de amenaza terrorista de Reino Unido fue elevado de “severo” a “crítico”, luego de que las autoridades no pudieron confirmar que el responsable por la explosión que mató a 22 personas e hirió a 59 en un concierto de Mánchester actuó solo.
El ataque ocurrió este lunes, en la recta final de un concierto de la cantante Ariana Grande.
La decisión de cambiar la gravedad de la alerta fue tomada por el Centro Conjunto de Análisis de Terrorismo (Jtac, por sus siglas en inglés). Theresa May afirmó que este organismo considera “no sólo que un ataque es altamente probable, sino que un nuevo ataque puede ser inminente“.
Las autoridades han señalado al estudiante de 22 años, Salman Abedi, como el presunto atacante.
La primera ministra británica afirmó que las investigaciones realizadas este martes “revelaron que hay una posibilidad que no podemos ignorar de que haya un grupo más grande de individuos vinculados a este ataque”.
Como resultado de esta decisión se añadirán tropas militares armadas para apoyar la labor de seguridad de la Policía, como parte de la Operación Temperer (“Templadora”).
Los elementos del ejército también se desplegarán en eventos como conciertos y encuentros deportivos, aunque estarán subordinados a las órdenes de oficiales de policía.
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