Espionaje, otro gasto absurdo de Gabino Cué; Robles Montoya tendría un sofisticado equipo

Fotos: Miguel Dimayuga y Jesús Cruz / APRO

Por Ignacio Martínez Platas

La administración gubernamental  de Gabino Cué Monteagudo, adquirió dos equipos 2-G para espionaje, que en su momento fueron entregados a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado  y a la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado.

Pero los exfuncionarios de las dependencias estatales aseguran que los software de espionaje eran utilizados para combatir delitos de desaparecidos, secuestros y extorsiones, sin especificar a partir de cuándo y cuántos casos fueron resueltos gracias a estos equipos.

Sin embargo, personal de la misma Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO), con información de empresas dedicadas a la compra y mantenimiento de los equipos de espionaje, confirmó que en Oaxaca existe un sofisticado software de espionaje 4-G, presuntamente en poder del Senador Benjamín Robles Montoya.

 Aunque se desconoce si el potente equipo, que cuenta con un alto nivel de capacidad de intercepción que incluye a los más recientes modelos de telefonía celular, fue adquirido por Robles Montoya durante el tiempo que ocupó diversos cargos en el sexenio de Cué Monteagudo o después.

Antes de llegar a la Senaduría, Benjamín Robles fungió como  Secretario Técnico del gobernador electo Gabino Cué Monteagudo, posteriormente, Jefe de la Oficina de la Gubernatura del Estado; en el 2011, Secretario Particular del Gobernador Constitucional y finalmente, Coordinador General de Módulos de Desarrollo Sustentable del Gobierno de Oaxaca.

Como se recordará, una vez que Robles Montoya se convirtió en Senador de la República, en las redes sociales se empezaron a difundir una serie de audios de conversaciones telefónicas comprometedoras de quienes en su tiempo eran considerados sus   “enemigos políticos”.

Entre éstos, Jorge “El Coco” Castillo, José Antonio Estefan Garfias, Hugo Jarquín, Rey Morales, al propio Gabino Cue Monteagudo, Beatriz Rodríguez Casasnovas y otros más, principalmente contra quienes participaron en los procesos electorales del 2010 y 2012.

Presuntamente, el equipo de espionaje, inicialmente operaba en palacio de gobierno, desde donde se interceptaban las llamadas telefónicas a los   dirigentes sociales, dirigentes políticos, a los propios funcionarios y colaboradores gubernamentales y periodistas que acudían a la sede del Ejecutivo Estatal, sin embargo, esto no ha sido confirmado por expertos de la Secretaría de Seguridad Pública.

Los equipos adquiridos por el Gobierno de Cue Monteagudo para ser utilizados en el combate a delitos de secuestros, extorsiones, chantajes y desaparecidos, no dieron resultados, ya que el software de espionaje 2-G prácticamente era obsoleto por su bajo nivel de intercepción, lo que se considera que fue un gasto oneroso e ínutil.

Es más, la compra de los equipos adquiridos durante el sexenio gabinista, permitió a los responsables de la adquisición hacer un negocio millonario al duplicar el precio en la facturación.