En la zona son inviables las casas que a veces construye el Infonavit, con materiales que no son de aquí
Ciudad de México (La Jornada).- El pintor juchiteco Francisco Toledo hizo un llamado a las autoridades encargadas de la reconstrucción en el Istmo de Tehuantepec para que se respete la arquitectura vernácula de la región.
En entrevista vía telefónica con La Jornada informó que las personas que perdieron sus hogares en poblaciones como Juchitán se encuentran muy preocupadas por no saber el tipo de viviendas que se edificarán ni si se respetarán las construcciones tradicionales.
“No podemos tener en el Istmo casas como las que a veces construye el Infonavit, que se hacen con materiales que no son de la región. No queremos eso para Juchitán. Aquí tenemos tejas, vigas, morillos que pueden servir. Tal vez sea un poco más caro, tal vez no se pueda construir tan aprisa, pero no queremos que se destruya o cambie la arquitectura vernácula y popular del Istmo.
No estoy seguro de que las casas que han ofrecido construir sean las que queremos. Sé que ahorita lo que necesitan las personas es un techo, pero en definitiva las construcciones tipo Infonavit no van ni con el clima. Deben pensarlo muy bien antes de continuar demoliendo y planeando viviendas que no van.
Desde las primeras horas de la catástrofe, el maestro Francisco Toledo, su hija Natalia y decenas de amigos pintores y artistas organizaron centros de acopio y brigadas de entrega de víveres en Juchitán y sus alrededores.
El artista explicó que se va a crear una organización para que esté al tanto de cómo serán la restauración y reconstrucción en el Istmo, “porque las personas afectadas necesitan ser consultadas, una por una, preguntarles cómo eran sus casas, mirar fotografías, ver qué queda.
“Tal vez eso hará más lenta la reconstrucción, pero creo que vale la pena esperar un poco, de lo contrario mañana se van a arrepentir de tener una casa chaparra, con un calor espantoso, con paredes delgadas, por ahorrar. Se necesita que las nuevas casas conserven esas características que tanto nos gustan a los istmeños y a los visitantes, las viviendas que el sismo dañó tenían un encanto muy especial que hay que conservar y recuperar.
“Las casas ideales del Istmo son las que se construyeron hace 200 años, pensando en el clima y las comodidades, y en esta vida familiar que gira alrededor de un patio. Si no hay patio, ¿van a girar ahora alrededor de la televisión?
Esperamos que las organizaciones o grupos que se están armando ya para la reconstrucción del Istmo dialoguen con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), con las muchas constructoras que ya están listas para arrasar con lo que quedó para comenzar a construir sus modelos que ellos tienen, pues creo que hay que pensarlo dos veces antes de comenzar a hacerlo.
Toledo dijo que los comedores comunitarios que se instalaron en varios barrios de la zona están trabajando muy bien, no sólo porque brindan alimentos a la población, sino porque se les da trabajo, la gente se siente útil, sobre todo al tener una ocupación y no estar pensando en el próximo temblor. Esta convivencia alrededor de la comida ha sido muy buena, pues no sabemos cuánto va a durar esta situación.
Respecto al acopio de ayuda, señaló que en estos momentos hacen falta medicinas. Por eso, en los comedores se están haciendo listas de los medicamentos que se necesitan para solicitar a los amigos y a los laboratorios que nos apoyen con este tipo de donaciones en estos momentos difíciles en los que muchas personas no están trabajando, porque se encuentran cuidando los restos de sus casas.
Por el momento, el pintor no piensa ir a Juchitán, pues considera que más que una ayuda sería un estorbo, no haría más que sentarme a llorar, porque además no tengo dónde quedarme, entonces prefiero quedarme aquí en Oaxaca, soy más útil con el teléfono buscando las ayudas.
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