El homicidio de Carlos Domínguez en Nuevo Laredo es el número 40 en la lista de periodistas asesinados durante la administración de Peña Nieto
Ciudad de México (El País).- Carlos Domínguez, un periodista y columnista de Nuevo Laredo (Tamaulipas) en el noreste de México, ha sido asesinado y su cuerpo encontrado en su auto la tarde de este sábado. El gobernador del Estado, Francisco Cabeza de Vaca, confirmó su muerte en Twitter y lamentó el hecho. “Mi compromiso con ellos (los familiares del periodista) y la comunidad periodística de Tamaulipas de que este homicidio no quedará impune”, se lee en el tuit.
Con este homicidio, que ocurre a 13 días del inicio de 2018, son 40 los periodistas asesinados durante la Administración de Enrique Peña Nieto. 2017 cerró con 12 homicidios de reporteros, una de las cifras más altas de los últimos tiempos. En diciembre pasado, el veracruzano Gumaro Pérez Aguilando, fue agredido por un grupo armado en una escuela primaria. La Fiscalía del Estado asegura que formaba parte de un grupo delictivo.
Domínguez fue asesinado a plena luz del día en el centro de Nuevo Laredo, uno de los municipios más peligrosos de México. La ciudad fronteriza ha servido desde hace décadas como un lugar clave para el trasiego de drogas de México a Estados Unidos y también ha sido uno de los campos de batalla más notorios entre Los Zetas y el Cartel de Sinaloa.
El comunicador trabajaba de forma independiente. Su último empleador fue el Diario de Nuevo Laredo, donde dejó de trabajar en 2016, según un representante del medio, quien declinó hacer comentarios sobre el asesinato. Las publicaciones pasadas de Domínguez en el diario tratan de temas variados: desde eventos culturales, hasta asuntos políticos y economía. En su última columna, publicada en su perfil de Facebook el pasado viernes, el periodista denunciaba la violencia que vive México en la víspera electoral. “La impunidad durante los últimos 18 años ha imperado en nuestro país”, escribió Dominguez. “Los asesinatos ni siquiera tienen una cifra correcta. Y en casi todos los casos, no hay culpables identificados”.
La Procuraduría General de Justicia estatal informó que ha iniciado la investigación del caso para “establecer las circunstancias que incidieron en el homicidio” y comprobar “si el crimen tiene alguna vinculación con la tarea periodística de la víctima”, según un reporte de la agencia EFE.