No puede haber justificación para los crímenes ni excusas para respuestas negligentes, expresa
Ciudad de México (La Jornada).- Representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en México urgieron al gobierno a reforzar las acciones para combatir la violencia de género, en especial el feminicidio.
No puede haber justificación para la violencia de género y no hay excusa para respuestas negligentes, aseveró Jan Jarab, de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH). Llamó también al gobierno a que brinde los recursos necesarios para erradicar este prevenible y atroz fenómeno.
En entrevista, dijo que si bien el interés político por atacar este problema se ha incrementado, no se ha logrado cambiar la situación del país. La impunidad y la procuración de justicia son elementos clave. La primera, dijo, es muy alta por lo que no se puede ver el efecto disuasivo de la sanción y esto tiene su importancia para la prevención.
Previamente, en conferencia de prensa, en la víspera del Día Internacional de la Mujer –que se conmemora el 8 de marzo– Belén Sanz, de ONU-Mujeres, expuso que en México en promedio siete mujeres son asesinadas al día; en 2016 la cifra se incrementó a 7.5. En el mundo cada año 64 mil mujeres y niñas son asesinadas.
Los niveles de violencia son altos y alarmantes en el país, 66 por ciento de las mexicanas manifiesta haber sido víctimas de ésta en algún momento de sus vidas, aseguró. El origen, agregó, es la discriminación y desigualdad estructural de género, esta última tiene graves consecuencias no sólo en la vida de las mujeres sino en toda la sociedad.
Belén Sanz señaló que uno de los principales retos a enfrentar son las normas sociales, valores, actitudes, prácticas, estereotipos negativos que normalizan la violencia y culpabilizan a las víctimas, son factores que generan una actitud de impunidad.
Arie Hoekman, del Fondo de Población de las Naciones Unidas, dijo que las adolescentes y mujeres jóvenes están en mayor riesgo ante la violencia sexual, el feminicidio, las uniones y embarazos tempranos, que ponen en riesgo su transición a una vida plena y con igualdad de oportunidades. Por ello llamó a formar generaciones nuevas, igualitarias, solidarias y más productivas.
Christian Skog, del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, dijo que gran parte de la violen-cia de género tiene sus raíces en los primeros años de vida, cuando padres de familia, docentes y sociedad refuerzan los roles discriminatorios y tradicionales.
María de la Luz Estrada, coordinadora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, dijo que si bien hay avances en derechos para las mujeres, éstos todavía no llegan a la mayoría.